Problemas con el Agua tiene ´seco´ a Pance
Durante 20 días habitantes de varias parcelaciones en Pance optaron por desplazarse hasta el Club Farallones para poder acceder a la ducha diaria. La falta de agua en sus viviendas los impulsó a tomar esta medida.
Los moradores de la Unidad Residencial La Rosaleda vivieron una situación similar. Durante tres semanas madrugaron para aprovechar las escasas horas en las que se suministraba el líquido y de manera maratónica realizar sus actividades, ya que, desde las 8:00 a.m. hasta las 5:00 p.m. ni una gota de agua salía de sus grifos.
Dichas circunstancias evidencian la fragilidad del sistema de abastecimiento de agua en este sector de la ciudad. Las razones, según los expertos, son la expansión urbanística, la ausencia de un sistema de suministro único de agua y los niveles de contaminación que comienza a evidenciar el río Pance.
Actualmente en la Comuna 22 existen dos acueductos privados que brindan sus servicios a varias parcelaciones del sector. Asimismo, Emcali compró en el 2005 la Planta la Rivera para expandir su red de servicio en la Comuna 22.
No obstante, hay varias zonas que carecen de agua potable, como son el Callejón de las Chuchas, la Avenida 125 y los alrededores de las universidades San Buenaventura e Icesi, por lo que hay una cantidad indeterminada de condominios que capta el agua de quebradas y pozos profundos, los cuales se ven afectados frecuentemente ante los cambios climáticos.
“El año pasado, debido la sequía, varios de estos pozos disminuyeron su nivel, por lo que fue necesario cavar más profundo para encontrar agua. Lo claro es que estas aguas subterráneas no aumentan, pero la demanda de consumo sí”, explicó Carlos Guzmán, director de la Unidad Ejecutora de Saneamiento de Cali, que es la entidad encargada de velar por la calidad del agua para el consumo humano.
Guzmán señaló que durante el 2009 realizó dos visitas a los acueductos concesionados de esta zona de la ciudad. “Ante la ausencia de personal este año no hemos podido cubrir los acueductos de la Comuna 22 ya que tenemos que estar pendientes de los 30 que se encuentran en las zonas rurales de la ciudad”, dijo.
Jaime Mazorra, presidente de la JAL de la Comuna 22, comentó que el suministro de agua en la parcelaciones está determinado por el comportamiento del río Pance y sus canales 4 y 5.
“La contaminación en la cuenca alta, la sedimentación y obstrucción de las bocatomas en el invierno y la sequía en el verano, afectan el sistema”, anotó el líder comunal, quien agregó que a las áreas de expansión aún no les llega agua potable, por lo cual deben utilizar aljibes o pozos profundos con tratamientos primarios para tomar agua potable.
Parcelaciones como El Seminario, El Retiro, La Finca y algunos colegios también han hecho su propio acueducto.
Para algunos moradores de la zona, tener un acueducto propio tiene ventajas. Entre ellas, los costos.
“Por estar en estrato seis tener nuestro propio acueducto nos resulta más económico, si se tiene en cuenta que la gran mayoría de las casas del sector son campestres y tienen amplios jardines que se deben regar. Para el agua de consumo compramos porrones envasados”, dijo Mario Madrid, habitante de la zona.
Según Emcali, el promedio de consumo en Cali es de 19 metros cúbicos mensuales, mientras que en este sector asciende a 200 metros. Alfredo Urbano Jiménez, director de Agua Potable de Emcali, explicó que la Planta La Rivera abastece a 500 casas del sector y que tiene capacidad de cubrir 1.500 hogares más.
“Sin embargo, hay que tener en cuenta que muchos de los moradores viven en la zona desde hace 15 ó 30 años y es poco práctico conectarse a nuestro servicio porque de alguna manera ya tienen su propia concesión de aguas”, aseveró.
El funcionario dijo que el agua suministrada por la planta La Rivera llega con un presión determinada por lo que los constructores deben tener sistemas de repotenciación del líquido.
Entre tanto, el Dagma, entidad encargada de otorgar las concesiones de agua, dijo desconocer el número de acueductos privados y pozos profundos que hay en Pance.
“Hasta el 30 de noviembre tendrán plazo todos los usuarios del agua superficial de la ciudad, que la captan a través de vertederos, para que legalicen su aprovechamiento”, advirtió Jisela Aristizabal, jefe de Control del Recurso Hídrico del Dagma.
No comments:
Post a Comment